Holanda despidió a Brasil de Sudáfrica 2010 tras una dificil remontada (2-1). La Naranja Mecánica disputará la semifinal contra el vencedor del Uruguay-Ghana el martes 6 de julio en Ciudad del Cabo.
El duelo tuvo dos facetas completamente diferentes.
El primer tiempo fue totalmente dominado por los sudamericanos. Su buen toque aparecio durante 45 minutos.
Su tanto fue obra de Robinho a los nueve minutos, tras una bella jugada en la que el delantero se movió a las espaldas de la defensa y Felipe Melo le puso un servicio filtrado que aprovechó de maravilla.
Kaká, Luis Fabiano, Robinho y compañía metieron en problemas a sus rivales cada que rebasaron el medio campo, mientras Robben y Van Persie no fueron claros en sus oportunidades.
Pero la segunda mitad fue totalmente holandesa, los papeles se cambiaron. A los 53 minutos Sneijder puso un largo servicio y Julio Cesar, y Felipe Melo se estorbaron y el balón terminó en las redes. A partir de ese instante el color del juego fue totalmente naranja.
Brasil perdió concentración, profundidad, espítitu y a los 67' recibió el segundo gol, tras un tiro de esquina cobrado por Robben y peinado por Kuyt que Sneijder remató con la cabeza para poner a los suyos en ventaja.
La reacción de los amazónicos se estrelló en la sólida defensa europea.
La desesperación de los hombres de Dunga se maximizó a los 72 minutos cuando Felipe Melo se hizo expulsar por un pisotón sobre Robben.
Y la virtud europea fue aguantar los embates rivales lo que quedó del encuentro, anticipando y robando balones en un medio campo efectivo y poderoso. Incluso debieron ampliar el marcador, pero se equivocaron al menos tres veces en el área de Julio Cesar.
Holanda mató al gigante y está en semifinales
0 comentarios:
Publicar un comentario